Suponemos que cuando tomamos medicamentos, volamos en avión, comemos alimentos, usamos productos químicos o realizamos otras tareas cotidianas, los productos y procesos que utilizamos esperamos que sean seguros. Sin embargo, es necesario garantizarlo, por lo que industrias como la farmacéutica, metalurgica, productos químicos, aeroespacial, procesamiento de alimentos, entre otras, tienen regulaciones para asegurar la calidad de sus productos y procesos. Estas regulaciones generalmente requieren medidas periódicas de varios parámetros como la temperatura y humedad.
Controlar la temperatura y humedad previene daños a los productos. La humedad mal controlada puede causar:
Para prevenir estos problemas, las industrias que manejan productos susceptibles al deterioro instalan instrumentos para medir la humedad y la temperatura de manera continua durante el proceso de fabricación y también mientras los productos están almacenados.
Los instrumentos que miden la humedad incluyen:
Los instrumentos que miden la humedad deben calibrarse regularmente para asegurar que operen dentro de las especificaciones del fabricante. La calibración garantiza que las medidas sean fiables y consistentes, lo cual es vital para preservar la calidad del producto.
Para calibrar un higrómetro, el calibrador de humedad genera y mide diversas temperaturas y niveles de humedad relativa. Estos niveles se comparan con las medias del equipo bajo prueba (EBP). La diferencia entre las dos medidas permite calcular la incertidumbre de las medidas del EBP
La calibración se realiza utilizando un calibrador de flujo mixto de humedad, el cual genera humedad al mezclar aire seco y húmedo dentro de una cámara. Un sensor calibrado mide la humedad y temperatura de la cámara, garantizando una calibración rápida y precisa.
Pasos para calibrar:
Si la carga de calibración de humedad requiere un alto nivel de exactitud, se recomienda utilizar una referencia externa para obtener una mejor medida comparando la lectura del EBP con la lectura de referencia en lugar de con la pantalla del calibrador de humedad (se recomienda una incertidumbre de punto de rocío de 0,5 °C). Es común usar un higrómetro de punto de rocío como referencia. Un higrómetro de punto de rocío es un patrón de transferencia de humedad en el que una superficie metálica pulida se enfría hasta que comienza a condensarse agua sobre ella. En este punto se define el punto de rocío; un sistema de detección óptica mide la luz reflejada desde la superficie del espejo. Durante la calibración, la lectura del EBP se compara con la humedad medida por el punto de rocío de alta precisión en su sensor de espejo enfriado.
Hay 3 formas de configurar una calibración con un higrómetro de punto de rocío:
Cabezal remoto: En este método, el cabezal del sensor de punto de rocío se inserta en la cámara del generador de humedad. Este método reduce el riesgo de condensación y normalmente no se requiere una bomba externa.
Cabezal remoto con aire bombeado: Extraer una muestra de gas de la cámara de humedad hacia el sensor de punto de rocío insertando un tubo dentro del calibrador.
Estilo bomba: Bombear aire de la cámara del generador de humedad hacia el punto de rocío y luego devolverlo. De nuevo, se debe vigilar la condensación en el tubo manteniendo el punto de rocío del gas por debajo de la temperatura ambiente.
Consejos para asegurar una medias aptas de humedad:
Más información
Para obtener más detalles sobre la calibración de sensores de humedad, puedes consultar el seminario web titulado “Cómo Calibrar Sensores de Humedad”